«Actividades constructivas» es el segundo disco de piano solo de Ernesto Jodos para el sello rosarino BlueArt. A través de 11 piezas improvisadas o escritas, el pianista despliega su enorme capacidad técnica y un sentimiento a flor de piel. Arte de pasiones genuinas, la música de Jodos no necesita de artificios para mostrar la contundente verdad que encierra la belleza.
John Cheever solía decir que “El nadador”, uno de sus cuentos más conocidos, había sido de los más difíciles de escribir. “Dos meses de trabajo constante y 150 páginas de notas para 15 páginas de cuento”, recordaba en sus memorias, dando cuenta del enorme y paciente trabajo que subyace bajo una lograda sencillez.
“El nadador” es el segundo tema del nuevo disco de Ernesto Jodos: “Actividades constructivas” y un doble homenaje a un mismo tiempo. Al cuento homónimo y al recordado Gerardo Gandini, su colega en la música y el piano, quien le hizo conocer al narrador norteamericano.
Y es que en “Actividades constructivas”, como en la narrativa de Cheever, la complejidad es el andamiaje interno sobre el que descansa la simplicidad de la belleza. La elaborada trama que sostiene una sencillez solo aparente. Por eso los once temas que integran el disco tienen una entidad común. Exploración y desarrollo. Pocas notas y el silencio como un hilo conductor del mensaje.
Esto queda expuesto claramente en temas como el introspectivo «Láminas» y su lento andar hacia las profundidades del sonido, o en el lirismo de «Redondas» o la melancólica “Perspectiva”. Aunque sin aviso se instale de pronto el rítmico “Manos como personas”. O que la intensa y caótica improvisación de «Actividades constructivas» se adueñe del espacio, para que luego se exhiba la riqueza de ciertos «Baúles del mundo”, el único tema que excede largamente los cinco minutos.
“Actividades constructivas” contó con la producción ejecutiva de Horaco Vargas y la coproducción artística del guitarrista Carlos Casazza. «Carlos estuvo en la grabación y posterior selección de tomas y armado. Fue muy útil contar con una persona afín para debatir ciertas cosas y ver que muchas veces coincidíamos. En un disco de piano solo no hay con quien intercambiar ideas», explicó Jodos.