Cuenta la leyenda que a los 10 años el británico Neil Cowley dio el concierto para piano de Shostakovich en un repleto Queen Elizabeth Hall en Londres. Sin embargo poco después, el joven pianista daría un giro que cambiaría radicalmente su carrera y su vida.
A los 17 años dejó la música clásica y respondió un aviso en la Melody Maker y se lanzó de lleno al mundo de la música pop. A partir de allí participó en decenas de bandas de soul y funk de la época, en 2002 formó su propia banda, Fragile State y en los años posteriores sumó su aporte al encumbramiento de la cantante Adele.
La inquietud de Cowley lo llevó a producir otros artistas hasta que un buen día el jazz golpeó a sus puertas. Su primer paso en estas tierras fue un trio con Richard Sadler en el bajo y Evan Jenkins a la batería. En junio de 2006 crea su propio sello, “Hide Inside Records”, y lanza ese mismo año su álbum debut “Displaced”.
Este trabajo mostró a Neil como un pianista de primera línea y un soprendente compositor. El trío rápidamente se hizo conocido por sus temas pegadizos, sus melodías contundentes y el percusivo estilo de su líder. El álbum obtuvo el premio de la BBC al mejor disco de jazz del año 2007. Le siguieron “Loud, louder..stop” en 2008 y “Radio Silence”, en 2010, todos con la formación original.
Su último trabajo es el excelente “The face of Mount Molehill” de ese año, en el que Cowley profundiza su estilo tan característico. Para este trabajo la formación tiene su primer cambio. Deja la banda el bajista Richard Sadler y se suma el australiano Rex Horan y como circunstancial colaborador el guitarrista Leo Abrahams, un ex-discípulo de Brian Eno. Los cambios potencian la música de Cowley y hacen de “The face…” su mejor trabajo al momento.
