Adrián Iaies, Pablo Ledesma y la música de la sorpresa

Durante años Adrián Iaies y Pablo Ledesma mantuvieron vigente el deseo de compartir música sin poder concretarlo. Finalmente, a comienzos de un nuevo calendario, ese cruce de caminos se hizo realidad. Este sábado en Prez Jazz Club, música nueva para un nuevo formato. Uno de los encuentros más inesperados del nuevo jazz argentino llega a escena.   ledesma

Con una treintena de discos a su nombre, Adrián Iaies es uno de los músicos y compositores más prolíficos y experimentados de la escena del jazz local. Dueño de un estilo propio, en el que la melodía asume total protagonismo, ha sabido darle su impronta a las distintas formaciones que lideró, con una vigencia artística que ya supera ampliamente las dos décadas.

En ese tiempo, y sin renunciar a su identidad jazzera, Pablo Ledesma profundizaba su búsqueda en la libre improvisación, campo en el que es una absoluta referencia y que le permitió compartir grabaciones y escenarios con íconos mundiales de la composición en tiempo real.

Hasta aquí nada que no certifiquen miles de textos o no pueda ser rastreado en las tantísimas grabaciones que cada uno lideró o compartió con colegas afines. La novedad (y esta vez el calificativo se sostiene por mérito propio), radica en la anunciada sociedad musical entre ambos. Inédita sociedad, que este sábado tendrá su absoluto debut en el escenario del Prez Jazz & Music Club porteño.

foto Horacio Paone 3

“Ya estuvimos ensayando y es tremendo como suena. Parece que tocáramos juntos desde hace 20 años”, dice Iaies. El entusiasmo se advierte contagioso. “Conocía la obra de Adrian, pero los nuevos temas me sorprendieron por su riqueza armónica y su audacia instrumental”, dice Ledesma, a horas del esperado debut.

¿Adrián, cómo surgió la idea de sumar a Pablo Ledesma a tu grupo?

Hace muchos años me crucé con Pablo en el Festival que yo dirigía. Creo que fue cuando tocó con Agustí Fernández. Recuerdo que charlamos algo durante la prueba de sonido y así, como al pasar, nos dijimos que estaría bueno hacer algo juntos alguna vez. Pasó un tiempo de aquello y un día Pablo me escribe muy predispuesto, preguntándome si no quería que finalmente hiciéramos algo. Realmente yo tenía ganas, pero justo en ese momento estaba complicado con temas personales y además había comenzado a reformar el estudio en mí casa y no tenía un lugar físico para encontrarme.

¿Durante ese lapso seguías pensando en esta posibilidad de colaboración?

Si. Pablo me escribió un par de veces para vernos, pero yo no podía, estaba metido en todo ese lio. No solo no tenía un lugar, sino que además había desarmado el piano para poder hacer todas las reformas. Y justo, cuando finalmente tuve el estudio, fue que surgió la fecha en Prez con dos sets con mi trio en la misma noche. Entonces pensé que en el segundo estaría bueno tener un invitado. Era una buena posibilidad para concretar el proyecto pendiente con Pablo. Y allí vamos. Con el trio junto a Carto Brandán y Santiago Lamisovksi en el primer set y con Pablo en cuarteto en el segundo.

378570739 6841627262537389 8038719379577971053 n

¿Habrá una música distinta para cada formación?

Si claro. La música del cuarteto va a ser toda nueva. Incluso varios de esos temas fueron escritos a partir de que Pablo me confirmó que iba a estar. Los escribí pensando en que los va a tocar él. Ya estuvimos ensayando y es tremendo como suena. Parece que tocáramos juntos desde hace 20 años…

¿Cómo lo sentís vos Pablo?

Me encantó. Todo. Los temas son muy interesantes. Es una música muy bien escrita. Desafiante. Tiene armonías muy cromáticas. Algunas me suenan cercanas a Billy Strayhorn. En otros temas veo armonizaciones a lo Wayne Shorter. Melódicamente son hermosas, pero déjame poner el acento en la armonía. Al ser cromática y muy alterada, te permite estar en el medio entre tocar in y tocar out. Podés ir y volver continuamente. Adrián es un muy buen compositor, de eso no quedan dudas. Además, y no es un dato menor, tengo un profundo reconocimiento por su gestión al frente del Festival de Buenos Aires. Fueron años maravillosos, irrepetibles, todos podemos dar fe de eso.

2

Este es un encuentro que sorprendió. Estaba claro que habían tomado caminos distintos y se veía poco probable esta sociedad…

Iaies.- Los dos somos músicos de jazz, pero está claro que Pablo viene de otra tradición. Él se ha desarrollado en la libre improvisación, que no es ciertamente lo mío. Pero también pienso que si juntás dos, tres o cuatro músicos que se respetan y tienen algo para decir, más allá de sus coincidencias; seguro vas a encontrar un punto de encuentro. Necesariamente va a haber una zona de interés musical común.

Ledesma.- Todos venimos de algún lugar y –vos lo sabés- yo empecé en el rock. Pero además recordá que en los años 80 mi generación, que es la misma de Adrián, hacía fusión. Todos tocaban fusión. Y allí algunos hacían una fusión eléctrica, emparentada con el rock, y otros hacían lo mismo con el tango o el folcklore. Luego uno va creciendo, va estudiando y se va definiendo…

1537296058 iaies concierto 1200x519 1

Si está claro. Pero mientras Adrían permanecía dentro de la “geografía jazzera”, aunque hiciera tango o folklore; vos fuiste por la libre improvisación y las formas más radicalizadas.   

Ledesma.- Es que a mí me vuelve el apetito cuando cambio de dirección. Me ha pasado que estando mucho tiempo en un lugar me “achancho”. Me voy apagando. Y cuando aparece algo distinto se despiertan de nuevo todos los sentidos. Cargo pilas. Me pongo alerta. Además, soy muy curioso con la música y siempre me gusta proponerme desafíos. Uno de ellos es tocar con gente con la que no he tocado antes o que tiene otra estética.

Iaies.- Me parece que es muy sano guardarse siempre un margen para la sorpresa. Quizás lo que suceda no es lo que esperaba uno o el otro, pero puede llegar a ser algo superador. Algo novedoso. Y se supone que uno tiene la ilusión que tocar con un músico que viene de un lugar un poco diferente te ayude a sacar de vos algo también nuevo.

Ledesma.- Es que los músicos argentinos en general, y esto Adrián lo sabe muy bien, estamos siempre expuestos a este tipo de situaciones. Estamos más cerca uno de otros y todos tenemos necesidad de tocar. Por eso, más allá que cada uno pueda focalizarse donde más le guste, esa tendencia a juntarse siempre está allí.

¿La idea es seguir con esta formación? ¿Hay algún proyecto en este sentido?

Iaies.- Veremos. Hay que ver a donde nos lleva Yo mantengo mi trio a muerte, porque para mí un pianista de jazz es alguien que tiene un trio. Pero también me ilusiono con la posibilidad de seguir tocando con Pablo en cuarteto o también en dúo. Todo esto forma parte de una idea, de un deseo, que es el de tocar con más gente. Algo que ahora si puedo hacer, porque tengo un lugar en casa donde recibir a los músicos, donde ensayar o grabar. Y eso ya te mueve la aguja.

afiche

 

 

 

 

 

 

Si te gusto comparti

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *