No hay dudas que Carto Brandán es uno de los bateristas más requeridos de la escena local. Un músico inquieto y creativo que sabe sumar su arte a proyectos y músicas distintas, a los que asume con la misma pasión. Ya sea como parte de los combos de Ernesto Jodos o Pablo Ledesma, revisionando standards junto a Julia Moscardini o navegando las aguas del free con Tony Malaby y el “Colo” Arredondo. “Yo siento que hay muchos colegas que se juegan la vida en lo que están haciendo. Que aman de verdad lo que hacen” dice. Y cómo no incluirlo en ese reconocimiento.
Fotografías en show: Guillermo Beratarvide y Jimena Nacht
¿Qué priorizas a la hora de aceptar sumarte a un grupo, un show o un disco?
Lo que trato de priorizar es el hecho artístico más que el dinero que puede haber en cada convocatoria. Trato de trabajar con gente que me gusta, que me copa lo que hace. Trato de elegir la música que a mí me gusta. Esto puede ser desde una cantante como Julia Moscardini, con quien grabamos hace poco, o con los grupos de Ernesto (Jodos) o Pablo (Ledesma). Sucede también que muchas veces me convocan chicos nuevos, que hacen una música muy copada, y a mí me gustaría estar, pero no puedo comprometerme porque se superpone con algunos de los grupos en los que estoy…
Si bien la agenda es todo un tema en el mundo del jazz, me parece que vos sos siempre una de las primeras opciones para los líderes de grupos.
En algunos casos puede ser. Pero pasa también que mucha gente tiene distintas opciones en su grupo. No solo por una cuestión de agenda o porque un músico sea más o menos importante que otro. Sino por el poco tiempo que a veces se tiene. Entonces se establecen prioridades en eso también.
¿Cómo sería eso?
Pensá en Ernesto que en estos días está presentando estos días su último disco “La mirada detenida». Sabemos que no es una música sencilla. Y él tiene claro que yo la conozco. Que la he tocado. Que lo conozco muy bien a él, al resto de los chicos. Y entonces por eso, cuando le sale una fecha para hacer los temas de su disco, es muy probable que me llame a mí o que trate de que yo esté. Porque otro baterista va a tener que aprender esa música, va a tener que ensayarla y todo eso lleva un tiempo…a eso me refiero.
¿Además del disco de Jodos que mencionás, en que otros proyectos estuviste últimamente?
Estoy en un disco de Sophie Lussi que acaba de salir. “Altas horas”, lo grabamos el año pasado y ahora lo editó el Club del Disco, y en otro de Carlos Casazza en cuarteto, que se llama “La sombra del sauce transparente” y que está en BlueArt. Creo que este año también va a salir otro trabajo que hicimos con Carlos, con música original de él y en el que están además Juan Pablo Arredondo, Inti Sabev y Sergio Wagner.
Hace unos meses hiciste también un disco muy lindo con Pablo Ledesma, el Mono Hurtado y Pepe Angelillo con una relectura sobre el Gato Barbieri…
Si, ese disco quedo bárbaro. Estuvo muy bueno tocar y grabar con ellos. Bueno, con Pablo y el Mono vamos a grabar pronto en formato de trío. Creo que va a ser casi todo impro y algunos temas de Pablo. También grabé un lindo disco con Pablo Arredondo y Tony Malaby. Salió hace un año más o menos en un sello de Escobar, el Sello Cabello. Son unos chicos que hacen todo un laburo con cosas recicladas que es mortal. Y luego de ese grabamos otro, con el mismo trío, que vamos a ver como lo editamos. Es el mismo trío pero con el agregado de Mariano Otero en bajo en algunos temas. Otra cosa muy linda que grabé es un trabajo que grabamos con Franco Fontanarrosa, Martín Pantyrer y un cuarteto de cuerdas…Van a ser una serie de videos…ya salieron algunos, y van a seguir subiéndose a las redes. Es como una obra más general. No temas separados. Es un lindo desafío.
¿Y para cuando tu propio grupo, un disco a tu nombre?
Es que yo no soy muy habilidoso para todas estas cosas que no tienen que ver estrictamente con la música. Toda la logística que insume un grupo. Armarlo, hacerse de un repertorio, ensayar, conseguir fechas, buscar reemplazos, hacer prensa, etc. Ponerse todo eso al hombro. Siento que nunca termino de tener el tiempo suficiente para hacer todo eso.
¿Tampoco componés?
No, hace mucho que no escribo música. Desde que estudiaba no escribo. Pero tengo ideas, claro. Muchas veces me dicen que tengo que armarlas y terminar de darles forma. Pero eso también consume un montón de energía y yo ahora no puedo. Quizás más adelante, cuando actué un poco menos, encuentre el momento para hacer mi propio disco con mi música. Veremos.
¿Y cómo te imaginás que sería ese futuro disco…qué música tendría, que estilo, que instrumentos?
No lo sé. Quizás dependa de las ganas que tenga en ese momento. Yo quedé muy incentivado con ese primer disco que grabamos con Tony Malaby para el sello Cabello que recién te contaba. Yo conocía su música. Lo había escuchado mucho, pero nunca había tocado con él. Y lo que hicimos quedó buenísimo. Así que le dije que la próxima vez que venga teníamos que volver a hacer algo, que yo me hacía cargo de todo. Y lo hicimos y quedó buenísimo también.
¿Y cómo es ese disco?
Parecido al primero que hicimos, pero más libre. Tocamos lo que sentimos en ese momento. Sin pautas. Hace poco estuve eligiendo el material y estoy muy contento con lo que quedó. Pero igual, como te digo esto ahora, puede ser también que en el momento de armar mi propio disco se me dé por otra cosa, por tocar jazz más tradicional y buscar a la gente mejor para eso…
¿Ese disco con Malaby y Arredondo, el segundo, saldría a nombre tuyo o del trío?
No lo sé todavía. Quizás salga con un nombre ficticio. Hay una anécdota en relación a esto. Una vez fuimos a tocar con el grupo de Luis Nacht a un festival en República Dominicana. Y al otro día salió una nota muy linda en el diario. Allí mencionaban a todos correctamente y a mí me nombraban como Arthur Grandall. El periodista escuchó nuestros nombres por el presentador del show y Carto Brandan le sonó así, Arthur Grandall. Bueno, te imaginás, eso quedó como una broma permanente en el grupo, con Luis, Jero Carmona o el Colo Arredondo. Así que es muy probable que el disco se llame algo así como “Arthur Grandall Trío”, sería divertido.
¿Vos sos muy amigo del Colo Arredondo desde hace muchos años, no?
Si claro. Los dos somos de Escobar. Íbamos a la misma escuela. Siempre tuvimos vínculo. Yo grabé en los dos primeros discos de él. Tocamos juntos cada vez que podemos. El Colo no es sólo un músico. Es un artista en toda la dimensión de la palabra. En un momento se puso a fabricar guitarras. Hizo micrófonos. Como músico tiene una capacidad enorme y como compositor también. Además dibuja de maravillas….¿Te acordás los dibujos que hizo para el disco de “Nina y el Lobo”…eran geniales.
Está claro que te gusta el jazz en general, pero especialmente las formas más libres. ¿Por qué crees que esa música tiene un público mayoritariamente joven, más chicos que vos incluso, y no moviliza tanto a la gente mayor?
Si, generalmente es una música que le gusta más a los chicos que a la gente grande. No lo sé. Pero igual no es una verdad absoluta. Nos ha pasado muchas veces que veíamos en las primeras filas gente muy grande y pensábamos que capaz que en el segundo tema se levantaba y se iba. Y no, al contrario, terminaba el show y nos venían a felicitar. ¿Sabés que creo yo que pasa?…que la música en vivo no tiene género…
No tiene género…cómo sería
Es como cuando vos ves un artista pintando. Puede pintar abstracto o figurativo, no importa. Lo que te atrapa es ver al tipo generando arte. Creando en ese momento. Eso es lo que te atrapa. Y en la música pasa eso. Seguro que te ha pasado muchas veces. Vas a ver una música que en principio pensás que no te moviliza o no te convoca tanto y luego te recontra enganchás en el concierto. A mí me ha sucedido muchas veces y creo que nos pasa a todos.
Si es cierto. Incluso muchas veces la entrega del artista te llega tanto o más que la música…
Bueno, yo siempre pienso que hay algo que incluso está por delante de la música. Algo muy potente. No solo en el jazz, si no en la música en general. Quizás especialmente en el jazz o la música contemporánea. Siento que hay muchos colegas que se juegan la vida en lo que están haciendo. Que aman de verdad lo que están haciendo. Vos pensá por ejemplo en un saxofonista que sale de su casa con un instrumento que vale diez mil dólares. Gasta un dinero en movilizarse y luego llega a un lugar en el que hay 10 personas para escucharlo. Y el tipo se toca todo. Se toca todo sabiendo que lo que se va a llevar no le alcanza ni para pagarse el taxi o la chica que le cuidará a los hijos esa noche. ¿Eso qué es?…Es amor por lo que haces. Y eso si que no tiene precio.
Para ver y escuchar a Carto Brandán
13 de junio en Vicente el Absurdo, con Tony Malaby y «Colo» Arredondo. Julián Alvarez 1886. CABA
28 de junio en No tan Puan con Ernesto Jodos y el «Mono» Hurtado. Chacabuco 459. San Isidro
2 de julio con Tony Malaby y Pablo Ledesma en Vicente el Absurdo. Julián Alvarez 1886. CABA
10 de julio en Virasoro, con Tony Malaby y Ernesto Jodos. Guatemala 4328. CABA