Quizás la definición haya representado tan solo un comienzo. Furtivo: clandestino, disimulado, cauteloso. Con los resultados a la vista, poca relación pareciera tener aquel sinónimo de lo oculto con este último registro de la dupla artística y compositiva que integran Luis Nacht y Demian Cabaud, con la participación del notable Jeff Williams. Un trabajo audaz y creativo, que seguramente alcanzará la merecida notoriedad que su título contradice.
Fotografía de apertura: Vilma Dobilaite
Mucha música ha pasado por las manos de Luis Nacht desde aquel Nacht Musik, su disco debut de 2001. Desde entonces el saxofonista acumula ya una decena de trabajos a su nombre, en los que el cambio y la búsqueda son una constante. A esta nutrida discografía se agrega ahora este Furtivo, un renovado encuentro con el contrabajista Damien Cabaud, el inquieto músico radicado en Portugal con quien ya había compartido el singular Canto de Montañas, editado por el sello español Fresh Sound en 2018.
El nuevo registro, que el Club del Disco integrará a su catálogo, tiene un nacimiento casi casual. Es producto de una gira europea que realizaron este año Nacht y Cabaud y a la que se sumó entusiasta y sin conocer la música, el veterano baterista Jeff Williams (ex Stan Getz, Joe Lovano, Lee Konitz, entre otros). “Los grandes músicos te ayudan a elevar tu propio nivel. Pero nunca lo había experimentado con la magnitud que lo sentí esta vez, tocando junto con Jeff”, dice un conmovido Luis Nacht.
¿Cómo surgió la posibilidad de sumar a Jeff Williams en la gira que derivó en Furtivo?
Estábamos charlando sobre una nueva gira, cuando Demian me sugiere el nombre de Jeff. A mí me encantó y le pedí que le mandara la música que habíamos compuesto. Pero Demian me responde que no hacía falta mandarle nada. Bueno, le dije, pero tampoco me conoce a mí. Tampoco hace falta, me dice. Si yo te conozco para él es suficiente. Y así armamos esta gira de la que salió el disco.
Entiendo que acepte la recomendación de Demian con respecto a vos, pero salir de gira sin conocer la música. ¿No te extrañó?
Me pareció una locura. Pero bueno, es Jeff Williams. Vos sabés con quienes tocó este hombre. Es un músico increíble, con un background alucinante y, además, una hermosa persona.
¿Y cómo resultó el primer show en estas condiciones?
El primer show fue en Orense, en Galicia. Yo llegué un par de días antes. Ensayamos a dúo con Demian y luego tuvimos el show. Jeff se subió al escenario sin conocer los temas. No pidió papeles ni nada. Directamente nos pusimos a tocar y él lo hacía tranquilamente, sin haber escuchado la música ni a mí ni una sola vez. Y fue de locos. Hace poco descubrí que había un video de esa tocada. Me puse a verlo, porque una cosa es estar en el escenario y pensar qué bueno que estuvo y otra muy distinta es mirarlo desde abajo…
¿Y qué te pareció?
Tremendo. Es increíble lo que hace. Me enfoqué más que nada en mirarlo a él. Toca con una frescura, como si conociera la música de toda la vida. Está claro también que el sonido del grupo se apoya en el trabajo de Demian. Él es el que marca el camino. Es un contrabajista tremendo y Jeff lo conoce muy bien y por eso también es que confió en el potencial del grupo y en la música sin haberla escuchado antes.
No sé cuántos shows hicieron antes de grabar el disco. Pero querría saber si encontraste alguna diferencia en el abordaje de Jeff entre el primer show en Galicia y los siguientes, cuando él ya tenía una idea precisa sobre la música.
Hicimos unos diez shows. Diría que estaba más enfocado. Lo que no podría decirte es que en los últimos shows fue mejor que en los primeros, porque siempre estuvo increíble. Ajustado, creativo, absolutamente integrado a la música. En aquel primer show él no sabía nada de la música. Pero absolutamente nada. Y sin embargo tocó como si supiera.
Tocás desde hace muchos años y con músicos muy importantes. ¿Te había pasado algo así alguna vez?
No nunca. Lo qué si me ha pasado y aquí volvió a suceder, es sentir que este tipo de músicos te impulsa a tocar mejor. Eso es algo que siempre se dice. Que los grandes músicos te ayudan a elevar tu propio nivel. Pero nunca lo había experimentado con la magnitud que lo sentí aquí. Jeff tocó con gente muy talentosa, como Stan Getz, Lee Konitz o Dave Liebman y él también aprendió de ellos. Y eso en determinado momento se transmite. Vuelve a aparecer.
¿Tengo la sensación de que en este disco estás mucho menos contenido, más jugado?
Coincido con eso. Yo también lo noto. Y es esto de lo que venimos hablando. Es eso mismo. Cuando terminamos de tocar las primeras veces y yo me sentí totalmente diferente y se lo dije a Jeff. Más arriesgado. Más confiado en mí sonido. En mis ideas. Yo me di cuenta enseguida. Uno va con sus prejuicios, ¿sabés? Piensa si va a estar a la altura de esos músicos. Pero ese temor me duró nada y enseguida empecé a sentirme más suelto, impulsado por Demian y por Jeff.
¿Cómo armaron el repertorio para esta gira?
Bueno, yo escribí algunos temas y arreglé algunos otros anteriores para este trio. Mientras Demian hacía lo mismo desde Portugal. Luego nos reunimos en su casa antes de comenzar la gira. Incluso en medio de las charlas, más de una vez Demian se sentó al piano y compuso en ese momento algo que luego incorporamos.
¿Y cuando llegó la idea de grabar?
Eso vino después de tres o cuatro conciertos. Lo pensamos con Demian y lo decidimos un par de días antes de llegar a Barcelona. Es una ciudad que conozco bien, fui varias veces y tengo amigos allí. De hecho, paramos en casas de amigos. Pregunté entonces por algún estudio para grabar y me dieron la data. Los Estudios Vértigo. Teníamos poco tiempo, sólo un día entre show y show. Y se dio que justo tenían el estudio libre. El lugar es espectacular y el precio más que accesible. Hicimos tres tomas de cada tema y luego armamos otros totalmente improvisados. Estuvimos nada más que tres horas y nos fuimos con el master.
¿Cuáles son los temas que improvisaron en el estudio?
Uno es el tercer corte: Re Williams, que es uno de los que más me gusta. También La sonrisa en tus ojos, que dura manos de dos minutos y es como una baladita. Todos los temas en los que figuramos los tres como autores, son impros. Lo que sucedió es que teníamos solamente cinco temas compuestos. Y con eso no podés hacer un disco. Por eso el resto lo improvisamos en el estudio. Y quedó muy bueno. Al día siguiente nos fuimos de Barcelona a Valencia escuchando la grabación en el auto. Ahí coincidimos en que estaba realmente bueno y valía la pena editarlo.
¿Entonces?
Entonces me lo traje a Buenos Aires. Me fui al estudio de Mariano Otero con el master. Lo mezclamos, lo masterizamos. Luego hablé con el Club del Disco a ver si les interesaba. A ellos les gustó y decidieron editarlo. Todo resultó muy fluido.
¿Y el nombre Furtivo…cómo surgió?
Estuvimos como dos meses pensando el nombre y tirando distintas opciones con Demian. Al final nos decidimos. Furtivo es algo que sucede fuera de la vista de todos. A veces ilegalmente. Uno generalmente piensa en caza furtiva, pero también hay amores furtivos, miradas furtivas. Tiene cierto aire clandestino. De algo que se hace por fuera de los cánones. Y esa idea, un poco marginal, es la que nos convenció para el título.
¿Están pensando en continuar con el trío? ¿Habría alguna posibilidad de verlos por aquí?
Lo primero sí. Lo segundo lo veo muy difícil. No hay ningún apoyo como para poder pensar en una gira por acá en 2025. Es más factible que yo me acerque a Europa a que Demian o Jeff puedan venir aquí. Es una cuestión de números. La hotelería se podría resolver. Hay clubes que te pagan el hotel, o tenés casas de amigos dispuestos a darte una mano. Pero los aéreos son todo un tema. Ya estas cosas no se pueden gestionar por cancillería. Al menos por este momento…
Furtivo.
Luis Nacht. Demian Cabaud. Jeff Williams. Club del Disco. 2024
1.- Wabi Sabi
2.- El tio
3.- Re Williams
4.- La sardina melancólica
5.- Falso swing
6.- La sonrisa en tus ojos
7.- Gato negro, gato gris
8.- Sol mayor
9.- Hacia la nada
10.- Reverso
Luis Nacht
Músico imprescindible de la escena jazzística de Argentina, visita Europa desde hace más de 20 años, además de realizar giras por América, en España formó parte del Festival de Jazz de Terrassa, Festival de Jazz de Lugo, Jamboree, Porta Jazz Portugal, Jimmy Glass, Jazz cava Terrassa entre otros clubes de jazz.
Tiene 10 discos como líder y decenas de participaciones como sideman. Su concepción de la música aporta un sonido a la escena jazzística internacional personal. Toca y ha tocado con grandes músicos como Horacio Fumero, Tomás Gubitsch, Tony Malaby, Guillermo Klein, Bruno Chevillon, Fernando Otero, Javier Moreno, Demian Cabaud, Dani Perez, David Xirgu ,Hery Paz, entre otros
Demian Cabaud
Demian es un artista muy activo que ha tocado y grabado con Lee Konitz, Joe Lovano, Maria Schneider, Kurt Rosenwinkel, Darren Barret, Russ Johnson, Jason Palmer, Leo Genovese, Albert Sanz, Mario Laginha, Miguel Zenón, Maria Rita, entre muchos otros.
Da clases en el Conservatorio de Oporto (Esmae), Portugal, y en el programa de maestría de Jazz de Siena, en Italia. Demian es miembro regular de la prestigiosa Orquesta de Jazz de Matosinhos OJM desde hace 16 años.
Jeff Williams
Tocó durante un breve periodo con varios músicos en Nueva York en 1971, se unió a la banda del pianista Marc Copland y tocó por primera vez con el saxofonista Lee Konitz en la década de 2000.
Entre 1972y 1973 tocó con el saxofonista Stan Getz y poco después se unió a la banda Lookout Farm, liderada por Dave Liebman y Richie Beirach. Williams también fue el baterista del trío del pianista Beirach para grabaciones a mediados de la década de 1970.
Algunas de las composiciones de Williams se tocaron en los álbumes Coalescence y Jazz – blues. El título anterior también fue el nombre del grupo de Williams desde 1991 hasta 1996. Williams ha enseñado en la Royal Academy of Music y en el Conservatorio de Birmingham.