Curanto, el último registro de Luis Nacht, de reciente edición por el Club del Disco, muestra al saxofonista al frente de su quinteto y con un puñado de composiciones propias, en las que lo impensado adquiere un protagonismo esencial.
A través de su obra, suele decirse, cada artista escribe su propia autobiografia. En Luis Nacht, músico inquieto y protagonista singular del nuevo jazz que se hace por estas geografías, ese relato transcurre a lo largo de 11 discos propios, en los que el saxofonista construyó una mirada personal, siempre abierta a la diversidad.
El último de estos registros; Curanto, de reciente edición por el Club del Disco, lo vuelve a mostrar en su doble faz de instrumentista y compositor, con un puñado de temas en los que la improvisación marca el rumbo. “Buena parte de la riqueza de esta música es justamente no saber con anticipación que vamos a hacer”, dice con entusiasmo.
¿Cuál es el origen de este Curanto?
Es una música que compuse en los últimos dos años y que vengo tocando casi con el mismo grupo. Son temas que fueron madurando en todo este tiempo y que finalmente decidimos grabar.
¿Y cuando los llevas al grupo ya están totalmente definidos?
No, para nada. Llego con la idea principal. Con el motivo. Luego hay mucha libertad para que cada uno aporte lo suyo. Yo vengo hace tiempo con esa manera de hacer música y todo el grupo está muy involucrado. Todos conocen el tema y lo quieren. Entonces el resultado musical es producto directo de ese compromiso, de ese apropiarse de la idea inicial.
¿Y cómo se da ese proceso interno, hay ensayos o es directo en el estudio?
Nosotros no ensayamos nunca, ni siquiera para grabar. Y de allí parte esta riqueza, de no saber que vamos a hacer…
¿Y cómo se define que llega finalmente al disco?
Para este disco grabamos tres versiones de cada canción. Y en cada una de ellas intentamos hacer algo diferente. A veces modificábamos la velocidad del tema o probábamos a tempo. Otras cambiábamos los momentos en los que la música se detiene y cosas de ese tipo. Es como si fueran temas distintos. Es una manera de buscar, de experimentar y también de divertirse, de estar a gusto.
Imagino que esa búsqueda está muy relacionada con el tiempo que llevan juntos…
Totalmente. Hace casi 20 años que toco con estos músicos. Entonces hay un lenguaje común. Una maduración colectiva. Todos entendemos lo que el otro quiere hacer. Estamos más enfocados. El grupo alcanza entonces un momento de maduración. Y ese momento es el que hay que aprovechar para dejarlo registrado.
Tenés 11 discos como líder. Pero hasta aquí Mariano Otero solo había estado en el segundo de ellos, Nach Mood del 2003 y en La hora inexacta del 2018…
En el primer disco que mencionás hay dos duplas bajo-batería. En una Mariano con Pepe Taveira y en la otra Oscar Giunta con Guillermo Delgado. Pero es cierto que coincidí poco con Mariano en todos estos años y me centré más en la dupla de Jerónio Carmona y Carto Brandán.
¿Y qué te decidió a convocarlo ahora para Curanto?
Aquí yo quería el sonido del bajo eléctrico. Pero no cualquier bajo eléctrico. Quería el de Mariano. Porqué él aporta una visión de la música y un sonido que necesitaba, que además me gusta mucho.
Lo que sí es habitual encontrar en tus formaciones es un par de guitarras eléctricas.
Todo tiene que ver con lo mismo. Me interesan las dos guitarras, pero no cualquier guitarra. Juan Pablo Arredondo y Pato Carpossi tienen una forma muy particular de tocar. Además, van tejiendo entre ellos una sonoridad que me resulta muy interesante, muy personal.
No sé si estoy en lo cierto, pero creo que no suelen ser tan habituales en el jazz los grupos con dos guitarras eléctricas…más allá del Miles de los 70.
Pero hay más. Lo encontrás en la música de Paul Motian, por ejemplo. En la Electric Bebop Band de los 90. En ese grupo hay hasta tres guitarras a veces y dos saxos.
Justamente vos lo homenajeas en el primer corte del disco.
Si lo homenajeo en Re Motian, porque siento que ese tema está compuesto en el espíritu de algunos de sus composiciones. Fijate que acá hay una misma melodía que se repite una y otra vez, con ese aire de himno ritual…
¿El disco sale solo virtual o va a tener una edición en físico?
Por ahora solo digital. Está el proyecto de editarlo en vinilo. Pero eso está en manos del Club del Disco. Es un proyecto que se concretaría el año que viene…
Curanto. Luis Nacht Quinteto. Club del Disco
Luis Nacht saxo y dirección / Mariano Otero, bajo eléctrico / Patricio Carpossi y Juan Pablo Arredondo, guitarras / Carto Brandán, batería.